General

Colombia: uno de los países donde más asesinan ambientalistas

por Sergio Segura, Redacción ProMosaik América Latina, 11-07-2016

Entre 2015 y 2016 se presentaron 185 muertes de ambientalistas a nivel mundial, unas tres personas asesinadas por semana. El 66% de las víctimas son latinoamericanas, ocupando Colombia el tercer lugar con 26 homicidios después de Brasil que ha tenido 50. Los grupos paramilitares, las multinacionales y las empresas extractivistas son las principales responsables.

La minería, la agroindustria, las hidroeléctricas y la tala forestal fueron las causas de la mayoría de los asesinatos, las personas que han luchado contra este tipo de proyectos “se encuentran en la línea de fuego de las compañías de seguridad privadas, las fuerzas estatales y el próspero mercado de los asesinos a sueldo”, señaló Global Witness. “Uno de los factores subyacentes a todos los asesinatos fue la presión sobre la propiedad, el control o el uso de la tierra; por lo que muchas comunidades rurales se vieron sometidas a una violenta represión por parte de terratenientes y empresas con más poder que ellos”, dice el informe.

De los activistas y defensores asesinados en el 2015, 67 eran indígenas, es decir, el 40% del total de las víctimas. En Colombia se registraron 9 casos de líderes indígenas asesinados que, de acuerdo a los reportes de defensores de Derechos Humanos, los responsables de estos crímenes son los grupos paramilitares que trabajan en conjunto con las multinacionales y los empresarios locales, los cuales ostentan ilegalmente títulos de propiedad sobre grandes porciones de tierra que pertenecen a las comunidades campesinas e indígenas. Lo que evidencia, sin duda, que el problema de la concentración de la tierra es uno de los móviles más fuertes del conflicto armado y social en Colombia.

El caso Berta Cáceres

Uno de los casos que más ha conmocionado al mundo es el de la ambientalista y defensora de la tierra hondureña, Berta Cáceres, quien fue asesinada el pasado 3 de marzo en su casa en la comunidad de La Esperanza. Hasta el momento 5 personas han sido detenidas por este caso de homicidio, incluyendo a un alto empleado de la empresa Desarrollos Eléctricos S.S. -DESA-, que había amenazado a Cáceres por oponerse y liderar las movilizaciones indígenas contra la construcción de una represa en el río Gualcarque.

Informe: https://www.globalwitness.org/en/reports/dangerous-ground/