La riesgosa situación de los defensores de derechos humanos en Edomex
Redacción 09/02/2018 |
El Estado de México es la segunda entidad del país en donde más defensores de derechos humanos y periodistas solicitan protección federal ante el riesgo que su labor representa.
La solicitud es hecha a través del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras y Periodistas, el cual se echó a andar desde 2012 para atender las necesidades de protección y prevención.
Además de que 2017 fue el año más violento del que se tenga registro en México, también fue el que recibió e incorporó más casos que en cualquier otro año en dicho mecanismo.
Los datos fueron dados a conocer por Jan Jarab, representante en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, durante un acto público en San Salvador Atenco, Estado de México.
El Mecanismo de Protección para Personas Defensoras y Periodistas surge tras las recomendaciones de la visita a México de los Relatores de Libertad de Expresión, Frank la Rue y Catalina Botero en 2010.
Quienes defienden los derechos humanos frecuentemente se enfrentan a obstáculos, descalificaciones, amenazas, agresiones y criminalización, señaló Jarab al recordar las conclusiones a las que llegaron los Relatores Especiales sobre la situación de personas defensoras de derechos humanos, Michel Forst, sobre Pueblos Indígenas, Victoria Tauli Corpuz, y sobre Libertad de Expresión, David Kaye, durante sus visitas a México en 2017.
“Observamos como los defensores son a menudo desprestigiados y obstaculizados en su labor, siendo incluso víctimas de represalias.”Jan Jarab.
Jarab destacó los casos a violaciones de derechos humanos como el de Atenco, recientemente presentado ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, pero también el de Coyotepec, donde hay disputa por el agua, y Tecamac.
En la defensa del territorio señaló el caso del Frente de los Pueblos en Defensa de la Tierra y a la comunidad de Xochicuautla.
El representante en México del Alto Comisionado para los Derechos Humanos recordó que en lo que va de 2018, ya suman tres defensores y periodistas asesinados y uno desaparecido.
Se refirió al caso del periodista Carlos Domínguez, asesinado en Tamaulipas el 13 de enero.
También al de Guadalupe Campanur Tapia, comunera y una de las fundadoras de la ronda comunitaria de Cherán, quien fue asesinada el 20 de enero.
Mencionó el caso de la youtuber Pamela Montenegro, conocida como Nana Pelucas, quien fue encontrada muerta a balazos en un restaurante de Acapulco el 6 de febrero.
Jarab recordó también a Agustín Silva, periodista de Oaxaca, quien fue visto por última vez el domingo 20 de enero.
No solamente sus voces se han acallado. Se dan muchos tipos de ataques: amenazas, acoso judicial, difamación, criminalización, despojo, daño de material de trabajo, agresiones… Y también estas represalias arrebatan a la sociedad de sus voces más críticas. Son menos visibles pero obstaculizan o inhiben la labor y fomentan la autocensura”.Jan Jarab.