General

La respuesta de McDonald’s al salario mínimo de 15 dólares

29 Noviembre 2016

La compañía de comida rápida opta por máquinas de pedidos en todas sus tiendas.

McDonald’s ha anunciado que cada una de las 14.000 tiendas que tiene en EE.UU. contará con pantallas táctiles automáticas que reemplazarán la tradicional atención personal. De momento, la compañía está empezando a sustituir empleados por máquinas en aquellas tiendas en las que los trabajadores cobran sueldos más altos debido a leyes que regulan su salario mínimo. 

“Los cambios ya han comenzado a mostrarse en sus locales de Florida, Nueva York y el Sur de California, donde 500 restaurantes han sido actualizados (a este sistema). Los restaurantes en San Francisco, Boston, Chicago, (Washington) D.C. y Seattle serán mejorados a principios de 2017”, según un artículo publicado en ‘CNNMoney’ que, además, recoge que a partir del próximo año los clientes podrán hacer “sus pedidos a través del móvil”. 

Los robots dependientes en las tiendas

Así, McDonald’s apuesta porque los más de 20 millones de clientes que tiene en EE.UU. comiencen a hacer sus pedidos a través de pantallas táctiles o dispositivos móviles que luego serán entregados por un dependiente de la tienda en su mesa. Sin embargo, según el diario digital ‘The New American’, es solo cuestión de tiempo el que “esos humanos sean también reemplazados por máquinas”. 

El pasado mes de mayo, Ed Rensi, exdirector ejecutivo de la compañía, aseguró que el salario mínimo conllevaría menos puestos de trabajo: “Os garantizo que si el salario de 15 dólares se implanta en el país veremos una perdida de puestos de trabajo difícil de creer. Es más barato comprar un robot de 35.000 dólares que contratar a un empleado improductivo que cobra 15 dólares la hora por meter patatas fritas en bolsas”. 
Según Rensi, si una tienda puede reemplazar a un empleado que cobra 15 dólares por hora por un robot que cuesta 35.000 dólares, no solo mejorará los márgenes operativos de la tienda, sino que mejorará también la experiencia del cliente: los robots no padecen enfermedades, no tienen comportamientos ni se quedan embarazadas, no hacen huelga, siempre aparecen para hacer el trabajo a su hora, y a medida que el software mejora, proporcionan una interfaz amigable e interactiva con la tienda. 

Defensores y detractores del salario mínimo

De esta manera, según las matemáticas de Rensi, si un trabajador cobra 15 dólares la hora le cuesta a su empleador unos 38.500 dólares al año, incluyendo el seguro de desempleo y la parte que tienen que pagar a la Seguridad Social. Así, si el coste medio de un robot cuesta unos 35.000 dólares, esto significa que en un año la compañía habrá pagado menos del coste de un empleado y, además, ya no volverá a pagar más. Si hay 30 empleados en un McDonalds, y solo 10 son reemplazados por un robot, los clientes disfrutarán además de otro beneficio: precios bajos en sus menús. 

Se abre con la decisión de McDonald’s un polémico debate sobre el salario mínimo. Así, los partidarios del salario mínimo argumentan que incrementa el nivel de vida de los trabajadores, reduce la pobreza y la desigualdad, e incentiva la economía y  la moral de los trabajadores.

Por el contrario, los que se oponen al salario mínimo defienden que este aumenta el desempleo y la pobreza y daña especialmente a los pequeños negocios, que se ven obligados a aumentar sus precios para cubrir el aumento de los costes laborales.