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Aborto legal, el reclamo de las mujeres en Argentina

Por
Maylín Vidal*
, Prensa Latina, 1 de marzo 2018
Buenos Aires, (PL) Las afueras del Congreso argentino se tiñó de pañuelos
verdes esta semana por un clamor que retumbó con fuerza y que piden desde hace
años a gritos las mujeres de este país: debatir y aprobar el proyecto de ley de
Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). 
 

Con un
‘pañuelazo’ y una iniciativa en la red social twitter, miles de féminas
volvieron a salir a las calles de Buenos Aires para reclamar a los congresistas
que ya es hora de despenalizar el aborto, cuya implementación de manera ilegal
acaba con la vida de unas 500 mujeres por año.

La movilización se dio a pocos días que se presente en marzo por siete años
consecutivos el tratamiento del proyecto de ley IVE, que no ha encontrado el
quórum suficiente para llevarlo adelante y ni siquiera consiguió dictamen
favorable en comisiones a pesar de algunos intentos, el más reciente en 2016.

El tratamiento del proyecto es impulsado por las diferentes mujeres que
conforman la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y
Gratuito, que articula a mujeres de varios sectores.

Desde 2003 han luchado por instalar en la sociedad y en el Estado el debate
sobre la necesidad de despenalizar el aborto en Argentina; contribuir a que más
mujeres y organizaciones se sumen en este proceso y reclamo y lograr el debate
y la aprobación de una norma que legalice el aborto.

El proyecto por el que luchan consta de 13 artículos donde la palabra ‘derecho’
se repite.

‘En ejercicio del derecho humano a la salud, toda mujer tiene derecho a decidir
voluntariamente la interrupción de su embarazo durante las primeras 14 semanas
del proceso gestacional’, subraya la iniciativa.

‘Toda mujer tiene derecho a acceder a la realización de la práctica del aborto
en los servicios del sistema de salud, en un plazo máximo de cinco días desde
su requerimiento y en las condiciones que determina la presente ley, la ley Nº
26.529 y concordantes’, agrega.

Por prejuicio, tabú o patriarcado, lo cierto es que en este país hay quienes
hoy se oponen a esta iniciativa mientras miles de mujeres ponen en riesgo su
vida y su salud por la falta de acceso a este método de interrupción de la
gestación.

Cifras dan cuenta que aproximadamente en esta tierra austral abortan anualmente
de manera clandestina unas 500 mil mujeres y mueren más de 500.

‘Educación sexual integral para decidir, anticonceptivos para no abortar y
#AbortoLegalYa para no morir’, se podía leer en un mensaje en la red social
twitter de una usuario identificada como Trini, entre miles que salieron a
defender este proyecto.

En la campaña, sus organizadoras proponen despenalizar y legalizar el aborto
para que las mujeres que decidan interrumpir un embarazo tengan atención segura
y gratuita en los hospitales públicos y obras sociales de todo el país.

La defensa del derecho a este método es una causa justa en razón de su
contenido democrático y de justicia social, que busca asegurar el goce de los
derechos humanos a las mujeres hoy privadas de ellos, manifiestan las
integrantes de esta iniciativa y agregan:

‘Trabajar por el derecho al aborto en razón de justicia social, es reconocer
que en el contexto latinoamericano, sumido en la pobreza y la desigualdad
social, son las mujeres pobres quienes sufren o mueren por abortos realizados
en clandestinidad, excluidas también de otros bienes culturales y materiales’.

‘La ilegalidad del aborto da lugar a prácticas diferenciadas según la condición
socioeconómica de la mujer y a la falta de información. No queremos ni una sola
muerta más por abortos clandestino’, manifiestan.

Un clamor que retumba

Más allá de las oposiciones de ciertos sectores de la sociedad, en la marcha se
demostró que ya urge llevar esto al Poder Legislativo y discutirlo seriamente.

Desde jóvenes de varios estratos sociales, jubiladas, hasta militantes de
organizaciones políticas como el Frente de Izquierda, la Juventud Radical y
Nuevo Encuentro y diputados nacionales, entre ellos las Brenda Austin y Carla
Carrizo, Araceli Ferreyra y Gabriela Cerruti, los pañuelos verdes inundaron las
calles argentinas para decir ‘Aborto legal ya’.

‘Quienes asumimos la responsabilidad de representar al pueblo debemos dejar de
lado falsas dicotomías y proclamarnos definitivamente por el derecho al acceso
integral a la Salud Pública. Por el derecho al aborto legal, seguro y
gratuito’, apuntó en twitter la diputada Mayra Mendoza.

En la marcha, que transcurrió el pasado 19 de febrero, había mujeres de todas
las edades, especialmente jóvenes, madres con sus hijas, y muchos hombres
defendiendo también esta lucha.

Los pañuelos verdes se agitaban en cada intervención desde un micrófono
instalado frente al Congreso, en la que subían a defender una propuesta que
consideran un derecho esquivo por años en tanto entre la multitud se escuchaban
los cánticos y frases: ‘anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no
morir’.

El aborto en Argentina es un delito descrito en el Título I, Capítulo I
‘Delitos contra la vida’ del Código Penal, que establece como aborto no punible
el que se practicare a fin de evitar un peligro para la vida o salud de la
mujer o el que interrumpiere un embarazo por violación o de un atentado contra
el pudor cometido sobre una mujer demente.

El proyecto para despenalizarlo en cualquier circunstancia, será presentado en
una sesión especial el 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres.

Con un grito que crece entre diversas generaciones de argentinas, será
presentado por séptima vez con la esperanza de que en esta ocasión sean
escuchadas.

En la última oportunidad se reunieron 44 firmas provenientes de distintos
bloques y puso a trabajar a cinco comisiones: Legislación General; Legislación
Penal; Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia; Salud; y Presupuesto.

* Corresponsal de Prensa Latina en Argentina