La Guardia Civil de Pontevedra mantiene abierta una investigación para aclarar un grave episodio de abuso sexual que sufrió una joven de 19 años a la salida de una conocida sala de fiestas de la localidad de A Estrada, en el interior de la provincia de Pontevedra.

Según el relato de la víctima con el que trabaja la Guardia Civil, diez chicos a los que no había visto antes la asaltaron de madrugada y la rodearon, amedrentándola, tocándola e intentando desnudarla.

La chica formalizó la denuncia el pasado miércoles, pero los hechos habían ocurrido días antes, en la madrugada del sábado 9 de diciembre. Según ha podido saber EL MUNDO, ella es vecina de otro ayuntamiento, Vilagarcía de Arousa, pero acudió hasta A Estrada para asistir a una macro fiesta convocada con motivo de la reapertura de la conocida discoteca Lennon.

Tras formalizarse la denuncia, la Guardia Civil abrió una investigación y ya han realizado las primeras indagaciones pero, hasta el momento, no se ha producido ninguna identificación o detención. Además del testimonio de la chica, cuentan con el relato de una pareja que presenció lo ocurrido y que resultará clave en el caso.

La chica acudió con sus amigas a la Opening Party celebrada a partir de las 23.59 horas del viernes 8 y, tras varias horas en el local, sobre las 4 de la mañana, perdió de vista a sus acompañantes. No logró localizarlas en la fiesta, de modo que salió al exterior y se dirigió al coche, que tenían aparcado en un arcén próximo, para intentar dar con sus amigas o esperarlas allí.

En ese momento, se produjo el episodio de abusos. La chica estaba sola en las inmediaciones de la carretera N-640 cuando se le acercó un grupo de 10 jóvenes. Entre todos, la rodearon. Primero se rieron y bromearon y luego se aproximaron más y uno intentó quitarle el pantalón. No se detuvieron a pesar de que ella empezó a gritar y se produjo un forcejeo.

El episodio no fue a más porque una pareja que estaba en las inmediaciones sintió sus gritos y se fue acercando al lugar en el que estaban increpando a los asaltantes. En ese momento, salieron corriendo, según el relato realizado por la presunta víctima, que, además, dijo que los autores del abuso tenían alrededor de 20 años.