La Policía de Los Ángeles reconoce haber matado a un negro por error
10 Agosto, 2016
Una mujer transmite en directo la muerte de un hombre negro por los disparos de un policía en EEUULa Policía de Florida dispara a un terapeuta negro cuando intentaba calmar a su paciente en la calle
La Policía de Los Angeles ha reconocido que uno de sus agentes mató por error a un negro durante un enfrentamiento con un sospechoso del robo de un automóvil.Donnell Thompson, de 27 años, murió el 28 de julio en Compton, en las afueras de Los Ángeles, cuando un grupo de policías perseguía a los sospechosos de un robo que les habían disparado.En un primer momento, el jefe policial había dicho que Thompson correspondía con la descripción de uno de los dos sospechosos. Pero el capitán del departamento de homicidios, Steven Katz, ha corregido esas declaraciones en una rueda de prensa el pasado martes 9 de agosto.Katz ha explicado que tras varias investigaciones han justificado que no hay pruebas de que Thompson haya participado en el robo del vehículo o en el ataque a los agentes. Debido a que ningún arma fue hallada en posesión de Thompson.El conductor del automóvil robado disparó a los agentes que lo perseguían y luego sufrió un accidente y abandonó el vehículo para escapar por la calles del vecindario.Un vecino llamó al servicio de emergencia al encontrar a Thompson en su jardín, quien estaba acostado, con una de sus manos ocultas,. El cuerpo de polícia una vez que acudió al sitio, observaron que el joven no respondía a sus llamadas. Los uniformados temieron que estuviese armado y vinculado con el robo. Cuando Thompson se levantó, se les abalanzó y en consecuencia uno de los agentes disparó al joven.Según Matrice Stanley, hermana de Thompson, éste sufría de retardo mental. Mientras que Dwayne Hill, otro hermano de Thompson, exigió excusas públicas de parte de las autoridades.Este reconocimiento de la policía ocurre cuando se cumple el segundo aniversario de la muerte de Michael Brown, un joven negro de 18 años desarmado al que mató un agente blanco en Ferguson, Misuri. Su muerte detonó manifestaciones de protesta y disturbios que reavivaron las tensiones raciales en Estados Unidos.
